Libertad a veces borrosa
Esos muros se clavan en el corazón de tal manera que podemos olvidar hasta lo que verdaderamente nos hacía felices, incluso vernos capaces de volver a serlo y cuando lo somos nos sentimos raro. Esperamos muchas veces un tropiezo cuando todo va bien ya que nos acostumbramos a esa obsesión que tienen los medios de desmotivarnos.
Está en nuestra manos el resistir, el que resiste vence pero no a cualquier precio. A veces hay que ser blandos, retroceder, piensen que se quiebra antes una estaca de madera que uno de elástico. Lo blando prevalece, se instaura y es difícil derrotarlo, quebrarlo.
Aunque nos quieran hacer ver que la libertad ahí afuera está borrosa y coincide con nuestro ideal de felicidad, no hay nada como estar vivo y encima sentirse libre. No sucumbas la vida está ahí afuera, vivan la realidad por muy dura que sea y sean blandos, pues es la única manera de resistir sin quebrarse...
Que lindo
ResponderEliminarGracias muchacha, saludos.
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